Tiempo de lectura:
2 minutos

15 de noviembre de 2017. Fecha que se quedará grabada en mi memoria para siempre. Ese día los peruanos nos unimos y volvimos a sonreír después de 36 años. La selección peruana había regresado al mundial. Las calles eran una locura, la gente se abrazaba con desconocidos. No importaba nada, ni el trabajo al día siguiente, ni los estudios.

15 de noviembre 2017: la noche que el Perú nunca podrá olvidar | Selección peruana | Perú vs. Colombia | EN VIVO ONLINE | DEPORTE-TOTAL | EL COMERCIO PERÚ
El Comercio

Qué loco cómo el fútbol puede unir a un país, ¿no? Podemos tener un montón de problemas, pero cuando rueda el balón nos olvidamos de todo y el mundo se vuelve hermoso por 90 minutos. Eso es lo bonito del deporte rey, es capaz de emocionarnos y transmitirnos todo tipo de emociones.

Cada vez que juega Perú, los nervios y la ansiedad me matan durante todo el día. Me acuerdo que aquella fecha inolvidable tenía clase en la universidad hasta las 8pm. No podía concentrarme, caminaba por el salón, miraba por la ventana para ver cómo iba el tráfico. Lo único bueno era que mi profe siempre terminaba sus clases temprano. Le agradecí mucho ese día porque no me podía perder ni un minuto del partido.

Llegué a mi casa y ni siquiera podía comer de los nervios que tenía. Nos jugábamos la vida. Jefferson Farfán metió el primer gol y lo celebramos como si fuéramos campeones mundiales. Estábamos jugando mejor que Nueva Zelanda. Luego vino el gol de Christian Ramos que nos dejó un poco más tranquilos.

Todo parecía bajo control, pero siempre estaba el miedo de que nos metieran un gol. Acabó el partido y me abracé con mi familia. Empecé a llorar de la emoción, no podía creer que iba a ver a mi selección por primera vez en un mundial. Mi hermano en ese momento nos contó que ya había comprado sus pasajes para ir a Rusia. Debo admitir que me dio un poquito de envidia, pero a la vez me alegré por él. Ese día fue increíble, seguramente uno de los más bonitos de mi vida.